Como emprendedor he recibido muchos consejos de mierda sobre tener un sueldo muy bajo para preservar la vida del proyecto, sobre tener que darlo todo por el proyecto sin preservar unos mínimos para mi mismo y muchas cosas en esta línea.
Por suerte, el ecosistema está cambiando y empieza a haber recomendaciones y voces distintas. Pero sigue existiendo muy poca información “en abierto” sobre algunos puntos clave que han de tener en cuenta los emprendedores para preservarse a si mismos y tener éxito en el largo plazo. Con independencia de que un proyecto en concreto pueda fracasar.
Comparto mi visión personal sobre el “business plan” de vida del emprendedor desde mi experiencia actual. Cómo lo planteo a nivel personal y aglutino los consejos que voy dando a emprendedores en los que he invertido.
Seguramente mi visión sobre esto seguirá evolucionando con los años y haya puntos muy matizables. Con arrojar alguna idea que te ayude a tener un mejor futuro, estaré más que contento.
Y si piensas algo distinto, no te cortes y déjalo en comentarios. Que de estas cosas aprendemos todos :)
Emprender por necesidad vs emprender por vocación
Tengo la suerte de no haber tenido que emprender por necesidad nunca. Siempre he emprendido buscando crear o sentir algo, por vocación, gusto o como lo queramos ver.
Lo recalco porque hay mucha gente que tiene que emprender por necesidad, para buscarse la vida, para traer algo que comer a casa y sacar a su familia adelante.
Esa gente se merece nuestros máximos respetos, son los verdaderos héroes y heroínas, los que se enfrentan a las situaciones más complicadas. Pero aquí no voy a hablar de este tipo de emprendimiento porque no puedo aportar en lo que no conozco.
Lo importante es la diversificación
Los inversores lo tienen claro, esto es un juego de diversificación. Si meto dinero en 20, 30 o 40 compañías, y no soy un absoluto paquete eligiéndolas, la estadística me dice que alguna de ellas acabará valiendo una fortuna, compensará las pérdidas de las restantes y me hará ganar dinero.
Pero claro, al emprendedor no se le permite diversificar. Al menos no se le permite mientras no tiene un track-record hiper demostrado con varios exits y aportando mucho capital propio a los proyectos.
Pero el juego del emprendedor también está en la diversificación, al menos si lo que quiere es garantizar el éxito en el largo plazo. Eso si, el eje de la diversificación es distinto.
Asegurarte seguir jugando
La diversificación para el emprendedor viene a lo largo del tiempo. Puedes tener una idea de negocio brutal, tener los contactos, tener el conocimiento y los recursos… nada te puede asegurar que eso funcione. De hecho la estadística está en tu contra, y lo más seguro es que acabes fracasando.
Para tener la estadística de tu lado y maximizar las probabilidades de recoger los frutos de muchos años dejándote la piel, lo que tenemos que asegurarnos es poder seguir jugando a este juego que es emprender.
Para seguir jugando, lo que necesitamos es que cuando cerremos un proyecto, tengamos energía y recursos suficientes para montar otro proyecto o unirnos a otro proyecto de emprendimiento. Y eso, por desgracia, es muy poco habitual que ocurra.
El colchón
Cuando escuchas historias de emprendimiento, sueles oír hablar de las grandes apuestas, del riesgo que se ha tomado en cada momento, etc. Pero siempre escuchas a los supervivientes y nunca escuchas qué colchón tenían.
Para poder entender qué riesgos toma cada uno y si es algo que podrías asumir tu, resulta clave entender dónde se caería muerta esa persona si la jugada le hubiera salido mal.
Hay emprendedores que vienen de familias con muchos recursos y, por lo tanto, tienen muchos colchones donde caerse. Eso no les quita ni una pizca de mérito, porque emprender es jodido y se pasan mil situaciones que pueden reventar tu salud mental. Pero cuando analizas sus movimientos, hay que hacerlos desde la perspectiva de la existencia de esos colchones.
En mi caso, vengo de familia humilde, pero siempre tuve una buena educación y, sobre todo, siempre tuve un “colchón” en casa de mis padres.
En los momentos donde lo pasé más jodido, donde tuve que hacer las mayores apuestas, siempre pude pensar que en el peor de los casos podría ir a vivir a casa de mi madre y que siempre tendría algo para comer.
Si emprendes, algo que tienes que analizar bien es qué colchón tienes. Cuantos ahorros tienes, si te puedes apoyar en tu familia o en tu pareja, etc. Por ejemplo, François Derbaix ha contado en muchas ocasiones que el pudo fundar y jugársela a saco en Top Rural porque su mujer tenía un trabajo estable y aseguraba la economía familiar. Cuando las cosas empezaron a ir bien, ella también emprendió. Sin ese apoyo, no se la podría haber jugado de esa forma.
No intentes tomar los mismos riesgos y mismas decisiones que otros emprendedores sin tener en cuenta este tipo de cuestiones, porque estarás tomando la misma decisión en contextos muy distintos.
Para que tengas una referencia, los grandes emprendedores hechos a si mismos han contado siempre con gran apoyo familiar. Jeff Bezos recibió una inversión de 240.000 dólares de sus padres (cuando el ahorro medio de una familia americana es de 9.000$). Otros grandes emprendedores como Gates o Zuckerberg también han contado con familias que han podido aportarles grandes colchones económicos y contactos.
Vuelvo a repetirme, no hay nada de malo en estos colchones y apoyos familiares, todo lo contrario. Pero es bueno no compararnos con quién no conocemos todo su contexto.
Los límites
Una vez tienes claro el colchón (o no colchón) que tienes, otro tema muy relevante a plantearte es cuáles son tus límites en cuanto al riesgo/inversión que puedes asumir en el proyecto.
Históricamente siempre se ha dicho que el emprendedor tiene que ir all-in al proyecto, dedicar toda su energía, tiempo recursos… jugársela al máximo.
Y aunque hay una parte de emprender que te lleva casi de forma inercial a hacer esto, si que hay que plantearse bien los límites que uno no puede sobrepasar.
En mi caso, lo de los límites, lo aprendí a las bravas cuando cerramos BrainSINS tras diez años dándolo todo. El balance del cierre a nivel personal fue que perdí los +20.000€ que invertí al inicio (fue un préstamo que pedí al banco), unos 80.000€ de sueldos no cobrados durante varios años (durante épocas tuve que tirar de crédito para hacer frente a no poder cobrar), y lo peor de todo fue asumir la ejecución de un aval que hicimos mi socio Frankie y yo a la compañía para recibir un dinero que estábamos 100% seguros que íbamos a recibir (teníamos documentación que lo acreditaba, pero ese dinero nunca llegó) y que nos dejó 120.000€ de deuda que seguimos pagando a día de hoy.
En algún punto del camino tendría que habernos saltado un indicador de que nos estábamos saltando nuestros propios límites. El problema es que nunca llegamos a definirlos con tanta claridad.
Desde mi punto de vista, existen dos grandes límites a plantearse:
Cuánto dinero estoy dispuesto a invertir/arriesgar en total. Ya bien sea en forma de inversión, sueldos no cobrados o incluso préstamos personales o donde avalo a la compañía.
Cuánto tiempo estoy dispuesto a invertir en el proyecto, teniendo en cuesta el coste de oportunidad y también el tiempo profesional que nos queda disponible (que dependerá de tu edad y tus energías).
En cuanto al dinero a invertir/arriesgar, cada uno tiene sus límites en función de su capacidad financiera, su colchón, su situación familiar, etc.
Pero si que es recomendable no asumir ningún tipo de aval o responsabilidad personal en cuanto a la financiación de la compañía. Esto permite tener mucho más controlado el riesgo que estamos asumiendo y no meternos en dinámicas donde el sesgo del coste hundido nos lleve a acabar ahogándonos en nuestra propia miseria.
Limitando el tiempo
En cuanto al tiempo, creo que es la variable más jodida. El otro día me preguntaba un emprendedor y buen amigo sobre cuándo me di cuenta que teníamos que cerrar BrainSINS. Echando la vista atrás, tendríamos que haberla cerrado muchos años antes, pero cuando estás ahí metido es muy complicado.
Sin tener un modelo claro, a mi me sirve pensar en ciclos de diez años, ya que un proyecto exitoso suele llevar diez años desde ir de cero a venderse o generar una cantidad de dinero tan relevante como para que pueda tener un impacto diferencial en tu vida.
Pero, como tarde, a mitad de ciclo (a los cinco años), tienes que tener ya sensaciones muy claras de que el proyecto va a tirar con fuerza, aunque aún quede mucho por hacer. Lo ideal sería poderlo tener claro, como tarde, a los 3 años, pero la realidad demuestra ser mucho más tozuda.
En BrainSINS no vimos esa señal. Siempre costó todo mucho. Viéndolo con perspectiva, costaba demasiado.
En Product Hackers lo estamos viendo claro desde incluso antes de los cinco años de ciclo. Cuando el viento sopla de cola y te empuja hacia adelante, lo notas. A pesar de la dureza del día a día, de la multitud de cosas que pasan, sientes un empuje brutal que es el Product Market Fit de tu proyecto.
Cada vez que arranco un proyecto, además de marcar un límite de recursos, marco un límite de tiempo. Es interesante tener claro qué esperas alcanzar en cuanto pasen 1, 3 y 5 años, e ir evaluándolo sobre la marcha.
Lo jodido del tema es que las cosas nunca salen como lo tenías planeado, o te pasas o te quedas corto. Así que siempre toca reajustar. Y en ese reajuste tendemos a engañarnos a nosotros mismos.
Piensa siempre en el coste de oportunidad, y que si encuentras un proyecto con viento de cola, vas a conseguir mejores resultados con menos esfuerzo, y eso es gloria bendita.
Tu sueldo
Una de las mayores mierdas que he escuchado a algunos inversores es que tienes que tener un sueldo muy por debajo de mercado o que, mejor aún, deberías no cobrar para maximizar el tiempo de vida de la compañía.
Eso si, el que te lo dice tiene un cochazo y lleva a sus 5 hijos a colegios privados. Me parece fenomenal que a la gente le vaya bien, pero no que vengan a pedirle a los demás que hagan lo que ellos no hacen.
Por suerte el mundo del Venture Capital en España se está profesionalizando (porque hace apenas 10 años era una auténtica plaza de pueblo) y cada vez existe un mensaje más generalizado en pro del cuidado del emprendedor.
Si te encuentras algún inversor que te dice estas mierdas de malvivir, ya sabes… ¡huye!
Ahora bien, ¿cuánto deberías cobrar como emprendedor?
A mi me gusta tener dos perspectivas:
¿Cuál es la cantidad de dinero que te permite tener una vida parca pero sin complicaciones? Es decir, cuánto necesitas para llevar una vida simple pero que no renuncies a lo necesario (tu alquiler/hipoteca, tus hijos, etc.).
Para mi aplica el sentido común. Lo que buscamos es no renunciar a aquellas cosas que acaban siendo un problema a nivel personal, de pareja o con tu familia. Esos temas deben de poder estar cubiertos.¿Cuál es tu salario de mercado? ¿Cuánto estás cobrando (si es que estás trabajando por cuenta ajena antes de emprender) o cuánto podrías estar cobrando si aceptaras alguna oferta de trabajo de las que suelan llegarte por LinkedIn?
Esto te da otra perspectiva, seguramente más alta que la del punto 1. Y es una perspectiva muy valiosa porque esta es la cantidad que se te vendrá a la cabeza cuando las cosas se tuerzan mucho y empieces a decirte: ¿por qué narices me estoy pegando con todo esto por X míseros euros cuando podría estar cobrando Y en este sitio al que les dije que no?
El mundo es complejo e imperfecto y se dan mil circunstancias por las que te puedas tener que adaptar a otras cantidades. Pero a mi me gusta plantear el tener un sueldo que…
Como poco sea esa cantidad que me permita tener una vida sin lujos, pero sin tener que preocuparme de llegar a fin de mes.
Según la empresa vaya mejorando y la situación lo permita, incrementar el sueldo hasta que llegue a tu salario de mercado para no acabar engañado por ningún canto de sirena cuando vengan a ofrecerte otra cosa interesante y te pillen en un momento de debilidad.
Cuando las cosas vayan muy bien, tener un sueldo acorde, sin tantos remilgos. Que cuando las cosas van muy bien estarás generando valor a tus clientes, inversores, equipo… y está fenomenal que también generes valor para ti mismo.
Por si te sirve de referencia, aquí tienes un listado de sueldos (reales) de CEOs de startups que facturan menos de 1M€ en base a varios parámetros como experiencia del CEO, inversión levantada, etc.
Otras formas de generar dinero
Como fundador y socio de una compañía, además del sueldo, tienes otras formas de generar dinero. Y es interesante conocerlas para poder jugar las cartas adecuadas en cada momentos, así como alinear intereses con tus socios e inversores.
Sueldo: la forma más clásica y ya hemos hablado de ella.
Bonus: Una forma de poder plantearte una compensación mayor pero sin generar temor a tus inversores o stakeholders sobre el impacto de tu compensación en la salud financiera de la empresa, es tener un bonus o sueldo variable en base a objetivos.
Dividendos: Esto significa repartir un porcentaje de los beneficios de la compañía entre socios actuales. Permite alinearte con tus inversores/socios ya que todos veis retorno.
Venta en secundario: Vender un pequeño porcentaje de tus acciones a un nuevo inversor (o existente). Por lo general se hace en el contexto de una ronda de inversión, pero no es necesario.
Exit: Vender tu compañía o una parte mayoritaria. Es el mayor evento de liquidez al que puedes aspirar.
Eso si, piensa que tu principal activo emprendiendo son las acciones de tu compañía. Es el activo que más puede valer si las cosas van bien, por lo que gran parte de tu
Construyendo reservas para seguir jugando
Si todo va bien, llegará un punto donde generes cashflow positivo a nivel personal. ¡Enhorabuena!
Para mi este es el momento de construir reservas para poder seguir jugando pase lo que pase en esta partida.
Es cuestión de preferencias, pero comento un punto que para mi es relevante. Yo me he acostumbrado a llevar una vida muy sencilla, sin lujos, tratando de gastar poco mes a mes, para poder generar reservas en condiciones muy normales. Eso si, sin llegar nunca al lonchafinismo extremo.
Habiendo llegado a un punto donde no tenía reservas algunas y con una deuda encima, me di cuenta de la importancia de estar SIEMPRE construyendo reservas.
En nuestro caso, todos los meses generamos algo de ahorro e inversión:
Aproximadamente ahorramos un 15% del dinero que entra al mes. Esto quiere decir que se va directamente a una cuenta para ahorro. De esta cuenta el dinero solo sale si se va a inversiones varias cuando supera una cantidad.
Aproximadamente otro 15% se va automáticamente a Indexa Capital cada mes. Esto permite tener una estrategia de inversión pasiva e ir componiendo valor a lo largo del tiempo.
Algo menos del 20% se va a pagar la hipoteca, que es otro tipo de inversión.
Una pequeña parte, aproximadamente el 5% del dinero que entra al mes se va a crypto e inversiones de más riesgo (si, tengo varios NFTs que ya no valen ni para cagar 😂). Esta parte la voy variando pero mayoritariamente a día de hoy lo voy metiendo en el fondo Alpha One de CommonSense o en tokens o algunos otros temas de la gente de Tutellus a través de una iniciativa de Miguel Caballero.
Al tener todo prácticamente automatizado o ejecutarlo a principio de mes, el dinero que queda en la cuenta para gastos es el dinero justo para el mes y poco más. Esto te permite ser más selectivo a la hora de hacer compras, etc.
Todo sea dicho, si alguna vez nos queremos dar un capricho, de forma consciente, tampoco nos cortamos y rebalanceamos algunas cosas.
¿Por qué lo enfocamos así?
4 años y pico después de cerrar BrainSINS y quedarnos con la deuda que he contado antes, gracias a ser cañeros con este enfoque, hemos generado un activo que nos permite llegar a tomar decisiones vitales muy relevantes con margen de maniobra.
Tenemos recursos para estar casi un par de años sin meter dinero en casa y haciendo alguna inversión en algún proyecto proyecto propio si hiciera falta.
Esto da una tranquilidad vital BRUTAL y permite poder tomar decisiones muy potentes.
Diversificando más allá de tus proyectos
De forma puntual (3-6 veces al año) invierto en startups. Eso suele venir de ahorro adicional o del excedente del ahorro que generamos mes a mes. Superada una cantidad en cuenta (equivalente a 6 meses de gasto familiar), intentamos invertirla para no tener el dinero parado.
Para mi es una parte MUY importante porque invertir en otros proyectos me permite:
Diversificar a nivel económico y jugármela en “partidas de otros”.
Invertir en gente top de la que quiero estar cerca y aprender. Suele ser un chute motivacional.
Hacer network de calidad. Invertir en proyectos top te facilita algunos contactos con otros de sus inversores, con esos emprendedores en los que inviertes (que luego algunos lo petan y serían inaccesibles), etc.
Mantener la cabeza activa y “juguetear” en otros verticales sin despistarte demasiado de tu negocio principal.
Pero vamos, de inversión en startups no se porque me queda mucho por descubrir. Si te resulta interesante, la gente de Seedrocket tiene un campus para inversores brutal.
Conclusiones
Estoy seguro que se me quedan mil temas y detalles fuera y no me estoy dando cuenta. Todo sea dicho que tengo ya la cabeza como un bombo de tanto darle vueltas al tema y ordenar mis ideas al respecto.
Iré actualizando este artículo con comentarios que me hagáis y las cosas que vaya aprendiendo.
Como poco, espero que te sirva para tener una perspectiva algo distinta a la habitual en cuanto a cómo plantear toda la parte económica y tu “business plan de vida” como emprendedor.
Que te vaya lo mejor posible en tus proyectos y, sobre todo, que no pares de crecer en esta vida.
¡Abrazón y a por todas!
Mis otras cosas
📹 El 26 de julio organizamos un webinar en Mumbler sobre tendencias de podcasting en español para 2023 y 2024 de la mano de Pablo Fisher de Escucha Podcast.
🎙️ Hablo con Mireia Trepat, cofundadora de Freshly Cosmetics, sobre los aprendizajes creando y escalando esta brutal marca DNVB de productos de cosmética. También hablamos de su crecimiento personal.
🎙️ En Creciendo estuve hablando con Common Sense, una de las startups donde he invertido, sobre sus aprendizajes construyendo una startup wealthtech y también salieron temas interesantes sobre relaciones entre socios, etc.
Estoy aprendiendo cosas de
🪄 Estoy escuchando-leyendo “El sol desnudo”, novela de Isaac Asimov que ya está disponible en audiolibro.
Mis libros y canales
En “PsychoGrowth I: Hackeando el cerebro de tus compradores” profundizo en cómo podemos usar los sesgos cognitivos y el funcionamiento del cerebro de nuestros usuarios para afectar a su toma de decisión.
En “Futuros Posibles” recopilo los mejores relatos de ciencia ficción que abordan cómo la ciencia y la tecnología van a moldear nuestra sociedad.
En Instagram y Tiktok voy a ir compartiendo videos relacionados con Sobre Crecer.
Corti, eres Dios. Gracias por esta newsletter que, después de la charla del otro día, a poco lleva mi nombre en plan "espabila" jajajaj
Gracias por compartir detalles relevantes de tu historia de forma honesta. Como Founder lo veo util.